Nacimiento del grupo en 2009
Contar la historia del Grupo “Santa Verónica” es para mí una alegría al mismo tiempo que siento una gran emoción. Hace ahora más o menos 7 años, una Hna de la Compasión, de la comunidad que vivía en el barrio de “El Sablar” en Dax, después de una reunión de preparación para la Confirmación de adultos, me pidió que reflexionara sobre qué se podía hacer para ayudar y acompañar el crecimiento espiritual de la joven discapacitada que había recibido el sacramento de la confirmación, ¿qué itinerario cristiano podíamos proponerla?
Poco tiempo después me fui a la Comunidad de El Sablar para exponer a las Hermanas mi deseo de “dar a luz” un grupo formado por jóvenes discapacitados que trabajan en talleres protegidos. El proyecto fue tomando forma poco a poco pero nos faltaban animadores. La Hna. Ana María España, de acuerdo con su Comunidad, respondió positivamente así como Maryse y un poco más tarde Isabelle y Monique.
¿Qué nombre dar al grupo?
Fue en La Semana Santa, al hacer el Vía-Crucis, la sexta estación: Verónica limpia el rostro de Jesús, despertó mi sensibilidad. Verónica es la mujer que surge de entre la muchedumbre para acercarse al sufrimiento de un condenado. En un gesto de ternura, enjuaga con su propio pañuelo el rostro sudoroso y ensangrentado del Señor para devolverle la dignidad de un rostro humano. La comparación se me hizo evidente: las personas que forman nuestro grupo son Amor de Dios, creadas a imagen de Dios. Yo he querido darles “un rostro de Iglesia”, que puedan vivir su fe sin que se les aísle del resto porque forman parte de la comunidad cristiana y participan en la vida de la parroquia.
Las reuniones
Los encuentros que organizamos proponen una vida de equipo: se aprende a escuchar, a compartir momentos de convivencia fraterna … Se habla de lo que ellos viven, de su trabajo, de su fe y solidaridad, se reza juntos.
Se trata de ofrecer una vida en Iglesia por la expresión de la Fe, la lectura del Evangelio y la preparación a diversos sacramentos. De vez en cuando, se invita a personas del exterior para hacer una exposición al grupo. Las peregrinaciones y otras salidas lúdicas forman parte también del programa.
Y como punto final, una frase del Evangelio
Jesús alaba a su Padre porque revela el Reino de los cielos a la gente sencilla como cada uno de nosotros: “En aquel momento, Jesús exultó de gozo bajo la acción del Espíritu y exclamó : bendito seas Padre, Señor de cielo y tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla.” (Lc. 10,21)
Sylvie Dubois